" -¿Qué ocurre en el alma cuando nos enamoramos?- pregunté como una colegiala.
- En el alma no ocurre nada- dijo en tono didáctico-. Los sentimientos no se manifiestan en el alma. Siguen otro camino. Pero pueden atravesar el alma como el río desbordado atraviesa las zonas inundadas.
- ¿Y una persona inteligente y sensata puede detener esa inundación?.
- Querida señora -dijo con expresión animosa-, ésa es una pregunta interesante. Yo le he dado muchas vueltas. Tengo que responder que hasta cierto punto es posible. Quiero decir que... la razón no puede iniciar ni detener los sentimientos. Pero puede disciplinarlos. Los sentimientos, cuando se vuelven peligrosos para uno mismo y para los demás, se pueden enjaular.
-¿Cómo un puma?- pregunté sin querer
- Como un puma -confirmó, y se encogió de hombros-. En la jaula, el pobre sentimiento empieza dando vueltas, rugiendo, enseñando los dientes, mordiendo los barrotes...pero termina agotado y al final envejece, se le caen el pelo y los dientes, se vuelve manso y triste. Eso se puede hacer...Lo he visto. Gracias a la razón, los sentimientos se pueden amansar y domesticar. Pero, claro - dijo con prudencia-, no es bueno abrir la jaula antes de tiempo. Porque el puma escaparía y, si aún no está domado del todo, podría causar graves problemas." Sándor Márai
El corazón tiene sus propias leyes, se podría que agregar.
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